Ya llevamos varios fines de semana jugando a la ruleta de la fortuna con el tiempo. Algunos ya habíamos sufrido las inclemencias meteorológicas, mientras que otros habían conseguido esquivar las posibles inconveniencias atmosféricas. Pero este fin de semana, estuvieras en el hemisferios norte o sur, la gran mayoría de apasionados por los deportes outdoor y, en especial con todo lo relacionado con el multideporte, hemos padecido una pseudo GOTA FRÍA global.
Los hombres del tiempo llevaban días avisando y acertaron de lleno. Agua a mares por toda la península y al pasar por la zona de levante, la borrasca se retroalimentó y descargó sin compasión. Varias dudas aparecieron a la troika organizativa de la Swim Masterclass de Valencia. Pero las ganas de nadar en el mar del maravilloso grupo de deportistas no los aminalaron y se decidió seguir adelante con una acción estructurada desde hacía meses. Los triatletas nos adaptamos a cualquier situación, nos armamos de valor y, fieles a nuestra filosofía, decidimos superarnos una vez más. Eso sí, siempre con mucho respeto al mar enrabietado, que atacaba con sus fuertes olas la tranquila playa de La Patacona. Su fuerte resaca nos recordaba que la vida sonríe a los valientes, pero no perdona los imprudentes y los Nacho, David, Óscar, Javi, Carlos, Amparo, Maica, Isabel o Sílvia, entre otros, estuvimos en todo momento con mucho miramiento a la bravura que castigaba el Mediterráneo en la costa levantina.
Como indica la foto de JLH parecía que estos veinte temerarios eran capaces de desafiar los feroces azotes de un enfadado Poseidón. Afortunadamente, pudimos disfrutar de una buena nadada en aguas abiertas y asimilamos como nadar con corriente a favor o en contra y como superar o aprovechar las fuertes olas que rompían cerca de la playa. Sinceramente, al doblar por la tarde entrenamiento de natación, vivimos 24 horas de máxima intensidad acuática que seguro ayudará a mejorar el segmento más técnico del planeta TRI.
Sin embargo todos teníamos un interés especial en lo que estaba sucediendo en las antípodas. La armada española desplazada a Auckland, con varias de las estrellas del triatlón nacional con grandes posibilidades para estar en los puestos de honor, también soportó su particular GOTA FRÍA. A falta de comprobar la participación de los paratriatletas, cabe destacar los octavos puestos de la leyenda Iván Raña y de la diva Ainhoa Murua. Aunque, la plata de la más que promesa Fernando Alarza y la victoria, sin la recompensa final deseada del triunfo final de las World Series, del mito Javier Gómez-Noya demuestra que la élite española sigue con un fuerte papel protagonista en uno de los circuitos más exigentes del universo TRI. ¡Enhorabuena cracks!
Salud y kms, Xavi.
P.d. Un dato para los más estadistas: Javier Gómez-Noya ha corrido en tres ocasiones en el país de los All Blacks. En el 2003, se proclamó campeón del Mundo U23 en Queenstown; en el 2008, con motivo de la Copa del Mundo de Plymouth, Javi conseguía su segunda victoria en New Zealand y, este fin de semana, la capital económica del país, Auckland, organizaba la gran final de las World Series y el gallego sentaba cátedra, convirtiéndose en el príncipe kiwi. Un éxito sin precedentes que quizá obligará al ferrolano, en su próxima visita al país oceánico, a interpretar la famosa y tradicional danza Maorí: ¡the haka!.
