miércoles, 8 de agosto de 2012

ANECDOTARIO OLÍMPICO 2.0





¡Buf! Como cuesta digerir todo lo que aconteció ayer al mediodía. Personalmente, mientras intentó asimilar el éxito del coloso Javier Gómez-Noya, me van sucediendo todo tipo de flashes de la historia del TRI. ¡Lo que se ha sufrido para que este prodigio del depósito de talentos de Galicia consiguiera una plata para el recuerdo! Antes de continuar con el ANECDOTARIO OLÍMPICO 2.0, debemos tener presente que esta medalla la ha ganado el campeón gallego. Con la gran ayuda de su familia, su pareja, su troupe de entrenamiento (Reig, Gomar...), sus amigos, del que lo talló en sus inicios, el sabio José Rioseco, o del que lo pulió con maestría, el delfín Omar González. Todos ellos y muchos más han empujado para que Javi, con su virtuosa fórmula llena de talento y superación constante, subiera al podio olímpico. ¡Felicidades a todos!

Después de ver el agónico cuarto triatlón de la era olímpica hay muchos detalles a destacar. Hunter Kemper (USA) junto a Anja Dittmer (GER) han sido los únicos capaces de acabar las cuatro citas olímpicas. La caída del campeón olímpico en Sídney 2000, Simon Withfield (CAN), les dejó con este título que les catapulta directamente al hall of fame de la tenacidad.

Raras veces se observan cascos aerodinámicos en las pruebas con drafting. El malogrado Withfield y el británico Hayes los usaron. Mientras, los gremlins Brownlee usaron unos cascos tapados similares a los que usan el equipo profesional de ciclismo Sky en las etapas llanas. La tecnología sigue avanzando con paso firme y el TRI es un perfecto banco de pruebas.

Pudimos observar que muchos triatletas dejaron de usar nuestro manillar, el que nos ayudó a popularizarnos. Me cuestiono: ¿Por qué algunos de los grandes triatletas de la distancia olímpica no montan el manubrio de triatlón? Seguramente, expertos técnicos como Jaime Menéndez de Luarca o Antonio Alix, nos ayudarían a resolver esta curiosa duda.

Las tres medallas se las repartieron las delegaciones británica y española, las más castigadas por los chascos olímpicos en las tres ediciones anteriores. Como recordé, el favorito en Sídney 2000, Simon Lessing (GBR) finalizó en 9ª posición. En Atenas 2004, Iván Raña y Peter Roberston (AUS), los máximos aspirantes al cetro olímpico, quedaron castigados en su cruel calvario y en Beijing 2008, Javi rozó la medalla sufriendo una dura penitencia al finalizar en 4º lugar. Después del evento de ayer, los dos equipos han logrado lo que se merecieron durante años.

Sabíamos que el equipo británico apostaba con sus dos líderes, los hermanos Brownlee, a carta ganadora, incluyendo en el equipo a Stuart Hayes en función de gregario. Pero pudimos comprobar que ellos tuvieron varios pseudo coequipiers colaborando, como el eslovaco Varga que estiró, y de valiente, en el segmento acuático Esto sumado a los sospechosos fuertes relevos que dio el irlandés Noble ayudaron en la consecuención de la táctica anglosajona.

Si tiramos de hemeroteca el que proyectó esta tendencia fue Andreu Alfonso, director técnico hasta los JJOO de Beijing 2008, que cogió el guante de Eduardo No, mentor de la élite del TRI español hasta Sídney 2000. Quizá Andreu fue un avanzado de su tiempo, pero demostró durante años que con su idea cooperativa se podían conseguir grandes éxitos internacionales. El baúl de triunfos cosechados es su gran defensa a esta filosofía triatlética. Por este motivo, la plata de Javi es mucho más meritoria, al obligar a los BB a dejarse la piel para batirle pero, sobre todo, al tener que estar atento a todas las posibles escaramuzas del brit team & friends. Ayer demostró que era uno de los más fuertes de los 56 citados en Hyde Park, y nos regaló una demo de control,  moviéndose en todo momento en las primeras posiciones. Sinceramente, un espectáculo imperial.

Muchos detalles se observaron, muchas cosas a comentar pero la sentencia de Javi podría ser el mejor resumen. "Si esta medalla sirve para conocer más al triatlón, genial". Sabias palabras las del ferrolano, pues ayer tuvimos una oportunidad de oro para promocionar este deporte que tanto amamos. Los deportistas (Javi, Mario y Josemi) pusieron todo por su parte obsequiándonos con un ostentoso espectáculo. Mucha gente dejó de comer para mirar con atención, a través de la televisión, como el superhombre galaico se disputaba la medalla dorada. Fueron instantes de extrema tensión, de TRI pasión total. En consecuencia, como recordaban en épocas jurásicas almas eternas del triatlón español como Carlos Santamaría, Marisol Casado, Enrique Quesada... hay que vender bien el deporte, debemos ser unos buenos pedagogos para fomentarlo. Ayer, era la situación ideal para engorilar, emocionar y animar a todos aquellos que observaban el deporte multidisciplinar. ¡Una lástima!

¿Y el futuro? El futuro se intuye muy positivo. En meses conoceremos si la prueba olímpica pasa a distancia sprint. Si se ratifica el nuevo formato esto beneficiaría, por completo, a la armada española. Los tres olímpicos se mueven a la perfección en esta posible nueva dimensión multideportiva, sin olvidar a los nuevos fenómenos: Alarza, Albuín, Hernández, Oliveras... triatletas perspicaces capaces de continuar con esta nueva y positiva dirección que ha guiado, con sus éxitos, el figura Javier Gómez-Noya.

Salud y kms, Xavi.

P.d. Gracias a todos los que, ayer, remaron con fuerza para empujar al TRI.