lunes, 10 de diciembre de 2012

CORTINA DE HUMO



Sin que sirva de precedente, por primera vez me desmarco un poco de la habitual temática de este modesto diario  pseudodeportivo, que intenta ser instructivo y entretenido para toda la comunidad que ama las virtuosas disciplinas que inspiran superación. Sin embargo, las últimas intenciones reformistas que ha protagonizado el ministro de Educación, Cultura y Deportes, el Sr. José Ignacio Wert, que han despertado principalmente la ira en el segmento educativo catalán y de otros muchos sectores, ha provocado este post. Así pues, aprovecho mi pequeño sitio en el ciberespacio para intentar plasmar mi opinión al respecto y procurar mostrar la auténtica realidad de la educación catalana.

Me gustaría aclarar que en ningún momento quiero protagonizar un debate bélico, ni quiero encender ninguna mecha que provoque un incendio de grandes dimensiones. Todo lo contrario, solo quiero dar una versión bastante realista al respecto. Mi propio ejemplo puede aclarar esta aguda problemática que según el ministro ocurre en Catalunya. Efectivamente, soy catalán, hablo catalán y la gran parte del día a día me expreso en catalán, leo periódicos, escucho la radio y el poco tiempo que tengo para ver la televisión  lo hago en catalán. Por supuesto, recibí una educación catalana pero en ningún momento los profesores que tuve hace más de 20  años obviaron el castellano, al contrario, tuve maestros que solo hablaban español. Sin duda,  mis amigos, mis colegas y mis compañeros de todo el estado coinciden en que mi acento, cuando me expreso en el idioma que une a todo el estado, es característico, pero en ningún momento no he podido conversar, organizar cualquier campus o dar alguna charla por falta de vocabulario, ni por desconocimiento de la lengua. 

Otro claro ejemplo sería este humilde blog que intento tenerlo activo y el cual redacto, sin ningún problema y con soltura, en castellano. Por supuesto, existen muchos más casos de la realidad catalana, que los podría copiar en este particular post pero alargaría en exceso la redacción.





Pero comprobar la propia reacción postreformista del señor Ministro, que aclaró que se sentía: "como un toro bravo delante de los problemas", no hace sino confirmar que el patrón de la Educación, Cultura y Deportes de España  parece más un déspota dinosauro que un toro de lidia. Su talante descuida por completo que hablar varios idiomas es cultura.  Lo más curioso es que él mismo platica el catalán cuando aparece por la geografía más oriental del país. Lo más triste es que  este claro intento de capar el catalán es una enorme falta de respeto a una importante comunidad. Lo siento, pero desde mi punto de vista es un claro intento de confundir y confrontar  a todo un pueblo. Esta modificación ha despertado, una vez más, la indignación catalana y hasta el discurso que protagonizó, en la pasada campaña electoral, la presidenta del Partido Popular catalán ha quedado en entredicho, dejando claro el funcionamiento del grupo político que manda en la actualidad en el gobierno central. 

El Sr. Wert en vez de dialogar con los que viven diariamente la problemática idiomática de la comunidad autónoma catalana, ha decidido cargarse de un plomazo más de tres décadas de un idóneo plan de educación lingüística. Pero nadie recuerda que el ministro, junto al arcaico Sr. Aznar, es uno de los doctrinarios de la FAES (Fundación para el análisis y los estudios sociales) y que el nombramiento de su cargo fue parte de la obligada cuota del actual gobierno para tener contento al expresidente. 

Mi indignación ha ido en aumento desde que observé que no hay manera de dialogar con el rancio propulsor de la reforma educativa. Servidor se documentó al respecto y podría seguir narrando las bondades del Sr. Ministro, pero prolongaría en demasía la entrada. Sin embargo, sí que quiero aclarar que este hooligang del Real Madrid, como se tachó él mismo hace unas semanas en un diario deportivo, es el que disfruta  del máximo poder del deporte. Si trabaja de la misma forma como lo hace con la educación... ¡vamos apañados!

Sinceramente, esta maniobra es una simple CORTINA DE HUMO para provocar un conflicto entre la sociedad española y tener entretenidas a las plataformas mediáticas. Mientras, la cruel realidad sigue su curso, el estado se hunde, cada vez hay más gente que se suma en la lista del paro, hay más desahucios y hay más gente con problemas... Entretanto, los dirigentes siguen sin encontrar ninguna solución para remediar la dichosa crisis. Quizá lo que deberían de hacer es una reforma política de verdad y cambiar toda esta mediocridad que dirige el país.

¡Por favor un poco de sentido común! Salud y kms, Xavi.