Mientras algunos aún están intentando digerir todo lo engullido estos días, otros ya están apuntillando los primeros cimientos de la nueva temporada. Y es que, a finales de febrero o principios de marzo, algunas de las unidades del escuadrón triatlonero español entrarán en acción en diferentes escenarios del hemisferio sur. Las pruebas ITU (International Triathlon Union) que se celebran en Oceanía o en el continente americano podrán ser una buena oportunidad, para todos aquellos que tienen el "olympic dream" como objetivo, para llevarse un puñado de puntos al zurrón. Para los que sueñan estar en la meca hawaiana, el próximo mes de octubre en la categoría más selecta, el Melbourne Ironman será una perfecta ocasión para conseguir importantes puntos. En definitiva, mientras algunos aún estaremos arrancando el oxidado motor, otros estarán en la salsa competitiva.
Quizá en la distancia olímpica el año posolímpico es siempre una temporada algo más ligera que el resto. Muchos de los ases de la distancia aprovechan para disputar otro tipo de carreras y formatos para desconectar de la intensidad y presión que provoca la clasificación olímpica. Pero también es época de muchos movimientos. Como ya pasó en el 2008 con Javier Gómez-Noya, que confió su preparación al bueno de Omar González dejando a don José Ríoseco, uno de sus descubridores, en esta ocasión es otra de las estrellas del triatlón español, y no será la última, la que deja a su entrenador, el erudito César Varela, para fugarse al extranjero.
El talentoso Mario Mola y la prometedora Carolina Routier han decicido arrancar una nueva y ambiciosa aventura con una clara intención: "Hemos apostado al 100% por el triatlón y tanto Carol como yo lucharemos para estar en Río 2016. Por eso hemos dado este importante paso adelante al formar parte del grupo de trabajo de Joel Filliol".
Y muchos os preguntaréis: ¿Quién es Joel Filliol? Este candiense es, actualmente, uno de los más experimentados y exitosos entrenadores del panorama triatlético. En los 90 fue triatleta representando Canadá en diferentes campeonatos del Mundo de la especialidad. Sin embargo, ha sido como entrenador donde ha conseguido sus mayores éxitos asesorando a un espectacular abanico de F1 del triatlón de todas las distancias (Ironman, 70.3, ITU...) y, sobre todo, por crear su ambicioso proyecto: el equad elite. Kylie Jones, Lauren Campbell y Paula Findlay del equipo nacional canadiense, Jarrod Shoemacker y Sara Groff del USA team, la danesa Helle Friederiksen, última ganadora del Barcelona Triathlon o la checa Vendula Frintova, entre otros muchas más estrellas y futuras promesas forman parte del Filliol squad. Y, desde el 14 de enero Mario y Carol serán miembros de esta elitista comunidad, instalándose en la base de Florida (USA),
Pero el prestigioso gurú Mr. Filliol, además de tener en nómina a varios de los mejores triatletas del universo, trabajó para la Federación Británica de Triatlón (GBTU), concretamente en la base que tienen en Loughborough, supervisando los entrenamientos de fieras, que tanto hemos maldecido, como los Brownlee Brothers, Will Clarke, Helen Jenkins o Tim Don, entre otros miembros que formaron el programa de la UK Sport.
Anteriormente, este maestro de la preparación aplicó todos sus conocimientos en el Centro Nacional de Triatlón de Victoria (CAN) por donde pasaron Colin Jekins, Paul Tichelaar, Jill Savage y otras de las figuras del triatlón canadiense pero, sobre todo, colaboró de manera muy intensa y personal, durante la época más exitosa, de la leyenda y abanderado olímpico del país norteamericano, Simon Whitfield.
Aparte de pertenecer a la aristocracia de los sabios del planeta TRI, Filliol ha llevado la preparación de figuras de la larga distancia como Jordan Rapp (USA), Katja Schumacher (GER), Jodie Swallow, Phil Graves (GBR) o Terenzo Bozzone (NZL), entre otros, sin olvidarnos de todos los atletas anónimos, que no singulares, que han confiando su sabiduría para lograr sus retos soñados.
Sin duda, la FUGA que protagonizarán en breve Mario y Carol tiene muchos números para ser muy exitosa. Todo será muy extraño, desde la metodología al nuevo plató de entrenamiento, pero estos dos estandares del triatlón español se aplicarán, sin titubeos, la máxima del deporte multidisciplinar: "Adaptación es superación". Y ellos llevan mucho tiempo superándose. Ànims campions! Continuará...
