miércoles, 4 de abril de 2012

CÁTEDRA




Los que llevamos más de una vida enfrascados en el mundillo multideportivo lo íbamos comentando: "Desde las últimas temporadas el triatlón se ha sobredimensionado y todo este espiral positivo puede convertirse en negativo...". Hemos pasado de ser unos pocos millares de animosos "aventureros", a ser una masa de casi 20000 federados. La gente se autoexige entrenando y compitiendo, comparten unos extraordinarios valores, luchan para lograr su reto... Las marcas colaboran con fuerza, ayudando con todo lo que pueden, poniendo su enorme grano de arena para afianzar los pasos agigantados de este impresionante deporte. Y las organizaciones se van profesionalizando, tomando nota a la nueva realidad e intentando adaptarse.
Este nuevo camino ha pasado de ser un sendero de tierra a una autopista hacia el cielo, no sin tener que superar unos costosos peajes. Uno de ellos y como recuerda el editorial: "Siempre positivo...", muy recomendable de leer, del número 136, de este mes de abril, de la revista de referencia triatlética: FINISHER.
En esta ocasión los dos motores de dicho "magazine" ponen los puntos sobre las íes, dejando claro la aparición de algunos "talibanes", teóricamente amantes del Triatlón, capaces de minar esta autopista que tanto ha costado levantar, torpedeando sin compasión el rumbo positivo que llevamos. Lo más triste es que, a parte de no remar con fuerza, como hacemos muchos para afianzar el TRI en el panorama deportivo, revolucionan la parroquia con mala intención, destruyen, maltratan el deporte y, encima, algunos sacan "tajada" de este "TRI-boom".
Ni Jesús, ni Dani, alma maters de FINISHER, ni yo somos nadie para dar lecciones de moralidad, pero el bagaje adquirido durante muchos años nos permite recordar que el "trideporte" ha vivido en el anonimato durante décadas. Ahora que es un "juguete" que tanto gusta y divierte, deberíamos cuidarlo y construir unos sólidos cimientos para un futuro mejor. Porque el día que se rompa definitivamente, ¿quién lo arreglará?
Todos tenemos clara la categoría que ha adquirido el Triatlón y debemos tener claro que todos los eventos relacionados con el multideporte intentan rozar la excelencia, pero recuerdo que no somos perfectos y siempre habrán detalles a mejorar para futuras ediciones. Sin embargo, encarnizarse con las organizaciones no creo que sea lo mejor para el deporte. Cada uno es libre de opinar lo que quiera, pero siempre con respeto, con buenas intenciones y, si puede ser con intenciones de ayudar.
Una vez más la editorial de FINISHER ha sentado CÁTEDRA, ha dejado claro que todos estamos en el mismo barco, tenemos una buena oportunidad de pasar a ser un "barquito chiquitito" a un transatlántico de lujo, pero si vamos teniendo estas peligrosas entradas de agua, nos iremos a pique como ha pasado en otros deportes. ¡Seamos prudentes y coherentes!

Salud y kms, buena Semana Santa. Xavi