domingo, 1 de abril de 2012

QUINIELA




Uno no recuerda lo débiles que somos, hasta que sufre una semana complicada en todos los sentidos. En el estado físico, debido a una enfermedad que te deja en un estado de "low power" muy desagradable, que te va minando la moral, y todo acentuado por una importante diarrea mental que proporciona una semana "horribilis". Afortunadamente, como debería de ser, la mayoría tenemos fuertes pilares para aguantarnos en momentos de tal incertidumbre; y, al pertenecer a esta tribu; que es el TRI, sinónimo de adaptación a las situaciones críticas; y de superación delante de todo tipo de obstáculos, te ayudan a salir del pozo.
Aunque por momentos uno solo desee tirar la toalla al observar esta espiral de mediocridad tan elevada que estamos viviendo, uno se aplica el consejo de una gran amiga: "hay que quedarse con lo positivo..."; y una de las sensaciones más pragmáticas de esta temporada, es, para los que nos gusta el deporte de alta calidad, es que vamos a poder gozar de unos Juegos Olímpicos. London 2012 ya se divisa en el horizonte, desde hace unos meses muchos de los grandes atletas del planeta se están jugando los últimos billetes para el evento universal.
El TRI vive desde hace 12 años inmerso en calendario olímpico, los que han luchado y luchan por estar en las actuales "World Series", Copas del Mundo, Copas Continentales... lo hacen como camino obligado para ir al ansiado final: JJOO. Junto a los seguidores de estas prestigiosas pruebas, saben de la dificultad para poder cosechar algunos de los puestos de honor en dichos eventos. Paso a paso, subiendo escalones, afianzando cada movimiento, uno va construyendo su clasificación olímpica. Son 4 años de intenso trabajo, de muchos viajes, de lucha titánica, de muchos sinsabores... Y de momentos mágicos, especialmente si se consigue llegar a la meta soñada: Los Juegos Olímpicos.
A finales de mayo se cierra la clasificación definitiva que, con Javi Gómez-Noya y Ainhoa Murua clasificados; tiene a varios de los mejores triatletas españoles, de distancia olímpica, que se están partiendo el cobre, para defender las dos plazas restantes en el ranking mundial y conseguir el ansiado boleto. Muchos ya han empezado a marcar su particular QUINIELA: los Mario Mola, Josemi Pérez, Iván Raña son candidatos firmes, aunque el "rush" final del joven talaverano Fernando Alarza, un invitado de piedra muy peligroso, o el veterano Ramón Ejeda, que seguro aún no ha dicho su última palabra... se van a jugar el resto. En chicas Marina Dalaimcourt y Zuriñe Rodríguez parece que tienen el camino más limpio, aunque siempre puede aparecer la sevillana María Pujol, o algunas de las jóvenes promesas.
Quedan dos meses de máxima intensidad, varías de las pruebas que restan (Sydney-AUS, San Diego-USA, Eliat-ISR, Madrid-ESP...) serán consideradas de "alto riesgo" dramático; el lema de Toni: "Go Hard or Go Home"; será aplicado sin piedad y la espada de Damocles irá decapitando a los más débiles. Señores, hagan juego, configuren su posible QUINIELA, y suerte.

Salud y kms, Xavi

P.d. Por experiencia estos meses son muy duros físicamente y psicológicamente para estos campeones, y cada detalle es pieza importante para poder conseguir este éxito tan privilegiado. ¡Respeto!